Alerta por la ocupación por parte de neonazis de un edificio en Madrid..

El fascismo suele resurgir con fuerza en cada periódica crisis del sistema capitalista. Cuando la precariedad, la marginalidad y el paro se ceban con la clase trabajadora, rápidamente llegan los fascistas para aprovecharse de la situación y justificar el racismo, la xenofobia o el culto a la autoridad, con la excusa, por ejemplo, de que los extranjeros supuéstamente quitan puestos de trabajos a los autóctonos. Es evidente que este tipo de provocaciones de la ultraderecha beneficia al liberalismo, pues irremediablemente mina la union entre trabajadores nacionales e inmigrantes (legales o no), destruye la solidaridad con los más débiles y desvía una rabia que debería estar focalizada en un conflicto entre clases y siempre contra el gobierno y la patronal u otras instituciones del Estado. El fascismo es la punta de lanza de un mecanismo a gran escala que comienza en la explotación laboral y termina cuando el trabajador cede ante la violencia reaccionaria, la ignorancia, el odio y la sumisión. El fascismo exige obediencia, prejuicio y agresión, seguir ciegamente las consignas de un lider fuerte, nada más lejos del ideal libertario del ser humano cultivado en la autonomía, la reflexión, la solidaridad y la crítica a toda forma de autoridad que desde nuestros comienzos intentamos reivindicar y promover desde la CNT. Por ello queremos hacernos eco desde CNT de Ciudad Real de esta nueva amenaza del fascismo ocurrida en Madrid.

Este pasado mes de agosto, en el barrio madrileño de Tetuán, en una calle perpendicular a Bravo Murillo, muy cerca de la salida del metro de Estrecho, un grupo de neonazis ha ocupado una nave abandonada, denominándola Hogar Social Ramiro Ledesma. Detrás de esta ocupación están militantes del partido nazi Movimiento Social Republicano (MSR) y el propio partido que, aun habiéndose desvinculado por internet, aprueba y apoya el proyecto.

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