Concentración contra la Reforma Laboral en Puertollano
Se veía venir: los planes del gobierno para estabilizar y reducir el déficit público, que ya superaba el 11%, han hecho recaer el coste de la crisis sobre los hombros de los más desfavorecidos. Aunque habrá que ver cómo concreta el Consejo de Ministros este jueves día 20 las medidas anunciadas el pasado miércoles, es más que evidente que las propuestas económicas van encaminadas a satisfacer a la banca y a la patronal (no en vano, estos últimos se han lanzado rápidamente a aplaudir las medidas), y de camino tragar con la política neoliberal que impera en la UE, como si fuese un ejemplo de referencia.
CNT, que este año celebra su centenario de existencia, viene actuando -en la medida de susposibilidades- para frenar la sangría de parados, así como denunciando los favoritismos delgobierno para con la banca y la patronal y las pocas ganas de sacar a la superficie ese 25% del PIB que está sumergido. También denunciamos la compra del silencio del sindicalismo oficial que hasta ahora no ha encontrado motivos para movilizarse, lo que nos da a entender la complicidad existente entre este sindicalismo oficial y el poder, algo que por otra parte ya sabíamos.
CNT cree que si hubiese habido unas movilizaciones previas, el gobierno no se hubiese atrevido a presentar las medidas que anunció ayer y hubiesen recortado de otros lados. También se hubiera preocupado de buscar ingresos donde realmente se encuentra el dinero; esto es, en la banca, en la bolsa, en los impuestos de sociedades, de sucesiones, etc. Es notorio, por ejemplo, que en todo el paquete de medidas no se mencionen las grandes fortunas que se encuentran refugiadas en las Sociedades de Inversión de Capital Variable (SICAV) y continúan tributando al 1%, que no se persiga el fraude fiscal de las grandes empresas que puede llegar a los 280.000 millones de euros aproximadamente y situaciones similares. Parece que estas situaciones no generan desigualdad, al menos para sus dueños, por lo que no se deben tocar.
Para CNT el coste de la crisis debe recaer sobre los que la han creado, que no son otros que las entidades financieras y las inmobiliarias; pero como no será suficiente para tapar el déficit, CNT propone que el sueldo de los políticos -de todos- sea igual que el de los funcionarios a quienes van a rebajar el salario, al fin y al cabo dicen que trabajan para los ciudadanos; la eliminación total de cualquier tipo de subvención a sindicatos y partidos; la eliminación de ayudas a las diferentes confesiones religiosas; la puesta en marcha en la Agencia Tributaria y en la Inspección de Trabajo de unidades especiales contra la economía sumergida, la eliminación de las misiones militares en el exterior, que sólo entre enero y septiembre del año pasado superaron los 713,5 millones de euros…
En resumen, proponemos que se quite el dinero de donde está, de los que más tienen, que se haga un buen reparto de riqueza.
Finalmente, CNT considera una equivocación seguir negociando la reforma laboral, que no es sino una concesión a la patronal, puesto que va a suponer la pérdida de más derechos. Por todo ello, para nuestra organización, la única posibilidad de ir corrigiendo esta situación es luchar contra esta agresión de los poderes económicos mediante el enfrentamiento social, continuando y ampliando las movilizaciones que, en la medida de nuestras posibilidades, estamos protagonizando ya en diferentes sectores y localidades.